martes, septiembre 18, 2007

Las gafas

Ella solía andar por la calle con sus grandes gafas, "me hacen ver más grande" decía. A veces, se las dejaba puestas aún después de que cayera el sol, claro, la falta de luz la obligaba a quitárselas y entonces venía ese instante en que su rostro se volvía ecuánime, casi inerte y la mirada se clavaba unos segundos en el suelo. Luego, como si recordara algo de pronto, le volvía la sonrisa al rostro y te miraba justo a los ojos y reía, aunque sus ojos no lo hicieran.

Siempre era más alegre con ellas, sobre todo, se notaba cuando se veía en el reflejo de un aparador o en un espejo, incluso en el espejito del copiloto; lo bajaba solo como para comprobar que sus gafas estuvieran ahí.

-Me encantan tus ojos- Le dije una tarde tras quitarle lentamente las gafas. -Deberías usar menos estas cosas, esconden gran parte de tu belleza-. Ella solo levantó un poco los hombros, me arrebató las gafas y volvió a ponérselas sin haberme mirado siquiera, me tomó de la mano y caminamos un rato en silencio.

-Mis gafas me protegen- Soltó con tono juguetón. Sonreí. -Me protegen de tu amor- Dijo más seria. -Porque a la luz del día, no puedes ver a la muerte a los ojos y decirle que la amas... y en la noche... no importa, en la noche pueden decirse mil mentiras... o creerlas-.

Aroón Rivera

miércoles, septiembre 12, 2007

Confusión

Pues sí, uno se va quedando solo, va caminando sin reparar en cada paso y de pronto, como tropiezo con una pequeña piedra, accidentalmente descubres que a tu lado no se quedó nadie, que todo tu bienestar proviene de ti mismo...

Algo anda mal, pero no sabes qué...

viernes, septiembre 07, 2007

Bajo tus pies

Bajo tus pies
hay letras y relatos
hay una biblioteca
cuentos eróticos, erudiciones
filosofías crudas, vendavales.

Bajo tus pies
leo de a poco
de a relatos cortos
de entrevistas y cuentos
de artículo frívolo de revista
de horóscopo y de carta de tarot.

Leo, en mi ignominia
tus gestos, tus palabras
tus líneas de la mano,
el camino que tus pies delatan,
pero ávido de las letras
quiero descubrir, de tus pies,
la gran novela.

Aroón Rivera

martes, septiembre 04, 2007

XXIII

Abre la puerta, pasa,
tengo este corazón bajo la sábana
tengo la mano húmeda, estirada,
la sangre recorriendo todo mi universo
esperando que abras la puerta
y pases, a recostar tu cabeza
en mi almohada.

Tengo la noche constelada
la tierra abierta para echar semillas
tiré el veneno en mi café
y no ha pasado nada
decidí seguir vivo, seguir y seguir vivo
para entrar en el cuarto,
esperar que abras la puerta
y pases, y salgamos de un brinco
por fin... por la ventana.

En vuelo
Aroón Rivera