De noche, amada, amarra tu corazón al mío
y que ellos en el sueño derroten las tinieblas
como un doble tambor combatiendo en el bosque
contra el espeso muro de las hojas mojadas.
LXXIX (fragmento)
Cien sonetos de amor
Pablo Neruda
domingo, octubre 31, 2004
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario