miércoles, enero 10, 2007

Poema extraviado

No era más tenue entonces
ni más grata, ni más fuerte, ni más bella
no era ni mi palabra, entonces,
quien la tenía,
no era su corazón viajando en el viento
ni sus alas urgentes de mariposa herida.

No eran sus visitas taciturnas
no era su piel, sus besos, sus caricias,
no eran sus ojos de sorpresa... confundida
ni sus manos, sus pechos, su sonrisa...
no era usted más feliz, entonces,
ni más triste, ni más huraña,
ni más sensible, ni noble, ni colorida...
sino este afán estúpido
de darle nombre a algo...
que no existía.

Aroón Rivera

2 comentarios:

Loana dijo...

Pues según mi blog, aunque pueda contravenir todas sus palabras, lo que puede imaginarse existe. Pero sí, también, solemos andar por la vida haciendo cosas que no podemos ni imaginar, y que volvemos así, de lleno, inexistentes.

Saludos

Poeta sin palabras dijo...

Hola Loanita!!!

De acuerdísimo contigo!!!
El problema es que se hace vicio...

Besos